De acuerdo a informaciones relacionadas a la agencia de noticias kurda ANHA,
las fuerzas turcas de ocupación acaban de retirarse del pueblo de Sorke, luego
de haberlo invadido con el propósito de continuar avanzando hacia el interior
de este cantón, perteneciente a Rojava. La
razón del retroceso, por lo menos momentáneo, de las tropas dirigidas por Recep Tayyip Erdogan y sus secuaces, ha sido la enorme resistencia del pueblo de Afrin, que
se movilizó multitudinariamente hacia el lugar en el que se encontraban los
invasores.
Según indican las mismas
fuentes, la decisión de la población kurda y árabe de esa zona del norte de Siria, es continuar peleando para obligar a los
turcos a retirarse de la totalidad de las tierras ocupadas. De confirmarse, esto constituiría una gran
victoria de la movilización de los trabajadores y los pueblos, un triunfo que
debe consolidarse y profundizarse enfrentando y derrotando -en unidad con el conjunto de
pueblo sirio- a la dictadura de Bashar Al Assad, que está siendo apoyada por la
“Coalición Internacional”, liderada por Obama, Putin e Irán. La unidad en la lucha de los pueblos es la herramienta que servirá para conquistar la única solución capaz de responder a las demandas elementales de las masas: una Federación de Estados o Entidades Autónomas de carácter Socialista.
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