Por Juan Giglio
Mientras lo más granado de las milicias kurdas se encuentra
en el frente de Raqqa, lideradas en los hechos por los Estados Unidos, aviones
turcos bombardearon Rojava y Sengal, un ataque que no podría haberse llevado
adelante sin el acuerdo con las potencias, tal como lo expresó uno de los
máximos referentes kurdos de la región, Salih Muslim. En ese contexto, el portavoz de las YPG, Redur Xalil, que
visitó el lugar de los ataques acompañado de un oficial estadounidense, afirmó
que “las YPG no permanecerán en silencio frente a este ataque y por lo tanto,
se reservan el derecho a defenderse y vengar a sus mártires”. Xalil también
aseveró que la Coalición “tiene una enorme responsabilidad y debe asumir su
deber de proteger esta zona ya que somos compañeros en la lucha contra el
Estado Islámico”. Mark Toner, portavoz el Departamento de Estado, expresó que
el gobierno de Donald Trump estaba “preocupado” por los bombardeos, aunque “entendía”
que para Turquía el PKK era “una amenaza”, pero que esa “lucha” contra la
guerrilla, que tiene sus bases en Qandil, no podía “ser en detrimento de
nuestro combate común a los terroristas que nos amenazan a todos”. (Leer todo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario