Las mujeres de Rojava, con sus diversas organizaciones han
impulsado grandes movilizaciones para el 25 de noviembre, conmemorando el Día
Internacional Contra la Violencia de Género, con el objetivo de denunciar la
degradación de la mujer en las sociedades conducidas por los personajes más
nefastos y reaccionarios relacionados al integrismo islámico, pero también
dentro de su propio pueblo, donde combaten día a día contra el Patriarcado, que
no solo existe en las localidades gobernadas por las peores lacras de la
humanidad, sino en el conjunto del planeta, cuyo sistema Capitalista/Patriarcal
está en total y completa crisis. En ese contexto, las ciudades de Efrîn y
Kobanê fueron la vanguardia de estas marchas de mujeres, que denunciaban la
obligación de llevar niqabs o los matrimonios “arreglados” y con menores. Cabe
recordar, que en estados como Irán, Arabia Saudita o en la zona bajo control
del ISIS, un hombre tiene derecho, solo por ser varón, de casarse con niñas de
hasta 9 años. Esta semana, debido a la movilización de las mujeres y buena
parte del pueblo turco, el gobierno de Erdogan se ha visto obligado a retirar una
propuesta de reforma al Código Penal, mediante la cual los abusadores de
menores podrían salir en libertad si se casaban con sus víctimas. Este intento
de reforma no es más que una expresión de hasta dónde están dispuestos a llegar
los partidarios del “Sultán” Erdogan, no por casualidad uno de los jefes
políticos y militares de ISIS. (Leer más y ver otras imágenes)
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